En el municipio aragonés de Ansó, mantienen vivo un patrimonio cultural e histórico de gran importancia: los trajes tradicionales. Se trata de un patrimonio muy antiguo, cuyos orígenes se remontan a la época medieval, como atestiguan en la mujer el corte de la camisa y la basquiña (vestido verde de lana) y el peinado característico llamado “de churros”, y que esta localidad ha sabido conservar gracias a diversas iniciativas volcadas en su divulgación. Porque los trajes de Ansó constituyen todo un símbolo de la cultura, la historia, las tradiciones y los actos religiosos característicos de la zona, un hecho que permite conocer de una manera más precisa la vida y las costumbres ancestrales de sus habitantes. Otro de los aspectos que cabe destacar, es el hecho de que estos trajes se confeccionaban con materias primas del propio territorio, como la lana y el lino. Su confección implicaba además un proceso laborioso y artesanal.
La iniciativa de conservar y divulgar estos trajes tradicionales surgió desde varios puntos. Por un lado, el Ayuntamiento de Ansó, en un momento en el que los tiempos estaban cambiando y los trajes tradicionales iban dejando de utilizarse, encargó la confección de un total de seis trajes de calzón de hombre para conservarlos, junto con otros de mujer. Además, empezó a comprar todo tipo de trajes y complementos originales a aquellas personas que los tenían guardados en casa y que ya no utilizaban. De este modo, se fue recopilando y guardando adecuadamente todo este patrimonio textil en lo que se denomina “el ropero municipal”. Por otro lado, cabe reseñar la contribución de la Asociación de mujeres de Ansó llamada “A Cadiera” que, desde hace ya bastante tiempo y en exclusiva desde 2016, se dedica a la conservación de los trajes del ropero. De forma altruista, las mujeres de la asociación colaboran en el mantenimiento, limpieza y adecuación de los trajes antiguos originales, a los que también se ha sumado la confección reciente de alguna prenda moderna, pero usando telas y patrones antiguos.
El Día del Traje Ansotano
El acto por excelencia que contribuye a la divulgación del patrimonio de los trajes tradicionales de Ansó es el Día del Traje Ansotano, una celebración que data de 1970, es decir, desde hace más de 50 años y que tiene lugar en la localidad, anualmente, el último domingo del mes de agosto. Durante esta fiesta, este pequeño municipio de montaña retorna a sus raíces y muchos de sus habitantes se visten con los trajes tradicionales y llevan a cabo escenas costumbristas, como el vestir una novia en el día de su boda con el vestido de novia de iglesia, compuesto por varias capas que hacen que el peso total ronde los 30 kg. Además, en distintos rincones del pueblo, se recrean costumbres típicas y tareas cotidianas de antaño: la familia se dispone en las cadieras (banco de madera) junto al fogaril (el hogar, fuego), los pastores tras la faena descansan y preparan algo para chentar (comer), los niños acuden a la escuela y se entretienen con juegos tradicionales… Su importancia ha derivado en el hecho que este día haya sido declarado Fiesta de Interés Turístico de Aragón en 2003 y Fiesta de Interés Turístico Nacional en 2011.
El Museo del Traje Ansotano, un recorrido por el patrimonio textil del valle de Ansó
El traje tradicional ansotano es uno de los más antiguos del continente europeo, si bien a finales de la década de los años setenta del siglo pasado dejó de utilizarse en el día a día. El traje de Ansó ha quedado inmortalizado en distintas obras de arte como pinturas, fotografías, grabados… pero, además, de nuestros días, pueden conocerse muchas de sus características gracias a la labor llevada a cabo desde el Museo del Traje. El museo hace un completo recorrido por las distintas etapas y transiciones de la vida de los ansotanos a través de su indumentaria, ligada a su vida cotidiana y, de forma muy relevante, a los diferentes actos litúrgicos. De este modo, se pueden ver cómo eran los trajes que se llevaban para ir a trabajar y los que llevaban los niños y niñas en el día a día; los trajes que se lucían muy especialmente en actos festivos; los trajes utilizados en las bodas, que se dividían entre los que se llevaban durante la ceremonia y los que se lucían durante la fiesta de celebración; los trajes de cofradía que utilizaban las mujeres para presidir actos populares y ceremonias, así como el del alcalde de la localidad; todo tipo de complementos como la plata (el conjunto de joyas que lucían las mujeres), los escapularios, los gorros y los elementos de la boda, como los sobresalientes delantales que lucían novia y madrina. Hay una séptima vitrina donde se expone el traje invitado, trajes que cambian cada año con el objetivo de mostrar indumentarias típicas de otras zonas de Aragón o de otras Comunidades Autónomas.
Un legado que cruza fronteras
El traje tradicional ansotano no solo puede conocerse visitando el pueblo y su Museo sino que existen otros emplazamientos en los que admirar este símbolo cultural e histórico de esta localidad oscense. Es el caso del Museo del Traje de Madrid, donde se pueden contemplar algunas piezas características de Ansó, así como en el Museo Sorolla también en Madrid, dedicado al pintor Joaquín Sorolla (1863-1923), donde en algunos de sus cuadros los protagonistas visten trajes tradicionales de Ansó. Se conserva incluso en dicho museo un traje de boda comprado por el propio Sorolla, pues el pintor viajó por toda España para recoger las tradiciones e indumentarias de las regiones que iba a representar.
Museo del Traje Ansotano
C/ Santa Bárbara, 2
22278 Ansó
Huesca (Aragón)
turismo@anso.es
www.valledeanso.es (Ayuntamiento de Ansó)